La Teoría de la Evolución nos explica que las especies se adaptan a su entorno a través de cambios evolutivos de sucesivas generaciones que les permitan seguir sobrevivir a los cambios producidos. En algunos casos, esto provoca la aparición de nuevas especies, cambios en su instinto o adaptaciones fisiológicas. En otros simplemente no existe adaptación y están avocados a la muerte, normalmente provocado por un cambio demasiado rápido del entorno al que no son capaces de hacer frente.
Esta teoría es perfectamente válida en el caso de los periódicos, en pocos años han pasado de ser los reyes de la información en formato papel, a tener que competir en un medio donde no esta nada clara su posición dominante. El caso se vuelve mucho más grave si comparamos a los grandes medios en papel con otros surgidos años después y con una visión mucho más clara del mundo digital y de lo que es y debe ser Internet.
En la tradicional tirada de papel de un periódico existe una sección «Cartas al director» que es un esbozo de lo que debe ser una comunicación fluida entre la redacción y sus lectores, permitiendo a estos hacer puntualizaciones, correcciones o simplemente aportar otro punto de vista sobre una noticia del día anterior.
Para la mayoría de los medios el paso del papel a Internet ha significado simplemente una salida de contenidos por otro canal distinto, sin tener en cuenta las posibilidades que esa vía ofrece. Las ventajas de Internet sobre el papel son claras, y si todavía no ha caido es porque algunos añoramos esa taza de cafe con el periódico por la mañana, aunque ya leyesemos esas mismas noticias a través de la red.
Pero las nuevas generaciones, los llamados nativos digitales, no tienen ese concepto de lectura del periódico. Para ellos la inmediatez de las noticias, la posibilidad de puntualizar, corregir o simplemente aportar su opinión sobre la misma son algo natural. A priori, no parece demasiado lógico que cuando un periodista tienen conocimiento de que la noticia publicada no es correcta no ponga remedio y la cambie. En una noticia en papel eso es complicado, pero Internet ofrece esa posibilidad sin demasiado esfuerzo, y hoy por hoy, salvo contadas excepciones no se hace.
Aplicando la Teoría de la Evolución a este tema sólo quedan dos opciones, o adaptarse o morir. Y la segunda opción parece la más correcta ahora mismo, puesto que mientras la mayor parte de la redacciones no den a Internet la importancia que tiene (no es el futuro, ya es el presente) y sigan pensando que de momento es irrelevante el porcentaje de sus lectores que siguen este canal, están avocados a la muerte.
Realmente parece estúpido que hoy se escriba un artículo en Internet que no contenga varios enlaces con contenido relacionado (tanto a otros artículos del mismo medio, como a otros fuera de él), que no permita a los usuarios hacer comentarios, puntualizaciones o correcciones a la noticia, y que el responsable de dicha publicación no se de cuenta de lo enrriquecedor que resulta.