Algo muy frecuente, más de lo que parece a pesar de que el sentido común indique lo contrario, es que los usuarios de un servidor de correo intenten enviar auténticos «ladrillos» a través del correo electrónico. Para la mayor parte de los usuarios 100 KB o 100 MB les suena más o menos a lo mismo e intentarán enviarlo a través del correo sin siquiera pararse a pensar si es o no razonable.
Un amigo hizo una buena comparación para que se vea la diferencia, en el caso de los 100 MB es como si se intentase enviar por correo postal una lavadora, a todo el mundo le parecería una autentica barbaridad.
Para evitarlo, podemos limitar el tamaño máximo de los correos que son enviados con Qmail. Para ello nada más sencillo que indicar el tamaño máximo en el fichero /var/qmail/control/databytes que se quiere establecer expresado en bytes. Por ejemplo para limitar el tamaño de los correos a 10 MB escribimos en el fichero 10485760 .
Guardamos el fichero y reiniciamos el servicio, con esto ya estará establecido el límite máximo del tamaño del correo. El usuario recibirá un mensaje o un correo de aviso de que no puede enviar más «ladrillos» por email.