Como segunda parte de la optimización de MySQL podemos mejorar las consultas que realicemos sobre la base de datos. A pesar de ser una tarea tediosa, de vez en cuando es conveniente realizar una revisión de las consultas, comprobando que siguen siendo igual de eficaces que cuando las planteamos.
- Como primera recomendación al hacer una consulta a una tabla es no usar «*» en el SELECT. ¿Si no se van a usar todos y cada uno de los campos definidos en esa tabla que sentido tiene que usemos toda la información? Ninguno, pues eso, definir la consulta con SELECT campo1, campo2, … FROM dará mejor resultado
- Probar la consulta que vamos a implementar con EXPLAIN y analizar el resultado. Intentaremos que las consultas que realicemos no contengan ALL en la columna type, puesto que en ese caso se hará un escaneo completo de la tabla.
- Los campos utilizados con la cláusula WHERE son buenos candidatos a ser índices, comprueba con EXPLAIN como los usaría MySQL para determinar si está aconsejado su uso.
- Evitar el uso innecesario de LIKE y RLIKE, pues realizar comparaciones extensas llevará mucho más tiempo. Si se usan tablas MyISAM pueden utilizarse índices FULLTEXT sobre los campos de texto donde se realice la comparación.
- Al insertar registros, resulta más eficiente la escritura de varias sentencias la mismo tiempo que varias por sepado. Con INSERT DELAYED puedes generar una cola que esperará hasta que la tabla no esté siendo utlizada (No puede usarse con todos los motores). Utilizando INSERT LOW_PRIORITY darás prioridad a las sentencias de escritura y con SELECT HIGH_PRIORITY darás prioridad a las sentencias de consulta.
- Cuando la cantidad de resultados a devolver por MySQL no va a ser utilizada en su conjunto, como cuando se usa un paginador, devolver la cantidad apropiada utilizando la cláusula LIMIT.
Ante todo hay que mantener una premisa básica: no guardar datos innecesarios y no extraer información que no se va a utilizar.